A través de los años, Cadillac fue sinónimo de lujo, dinero y poder. Sus motores y sus diseños siempre llevaron el sello de la distinción. Claro, también se llegó a algunos extremos un poco...exagerados digamos, cuando en 1975 el Cadillac montó un motor de 7 litros...
Hoy en día Cadillac se ha modernizado y solo basta ver el Cadillac STS-V para ver que el rumbo tomado es el correcto. Y para ganarle a Mercedes Benz en ventas, quiere decir que algo bueno quedo de toda esa tradición. Y con el motor Northstar 4.4 de 470 hp ahora no solo es tradición y lujo. También es performance con estilo.
Miami Herald en español
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