James Bond ya no manejará el auto que todos hubieramos querido que manejara, pero Aston Martin tampoco se dormirá en sus laureles. Recién para el próximo año se lanzará un Aston Martin que está basado en el Rapide Concept, que fue presentado en Ginebra y que estuvo siendo ideado desde principios de los años 90. El valor teórico sería de 250,000 dólares y la junta directiva de Aston Martin ha dicho que su producción ya está lista para llevarse a cabo. Ojalá los problemas financieros de Ford (propietaria de la compañía) no vengan a empañar a este super-sedán.Fuente: Wired Blogs
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